Camping Puntica

Descubra el encanto del camping Puntica situado a orillas del mar en la hermosa región de Istria. Es un lugar soñado para unas tranquilas vacaciones en Croacia.

Durante sus vacaciones en el camping Puntica tendrá la oportunidad de pasar sus días junto al mar en una bella playa de guijarros fácilmente accesible desde su alojamiento. In situ no hay piscinas ni juegos acuáticos, lo que acentúa la calma y la serenidad de este camping croata. Una vez en la playa, la suave pendiente se adentra en el mar donde los más pequeños pueden chapotear sin peligro y divertirse desde una plataforma saltando al agua por un tobogán.

Puntica lo recibe en un entorno sereno en el corazón de un bosque de pinos sin actividades o animaciones ruidosas que puedan perturbar esta calma. Eso sí, de vez en cuando se organizan fiestas donde la sardina y el vino local son los principales protagonistas en un ambiente simpático y familiar. Los niños disponen de un área segura con juegos infantiles.

Para facilitarle su estancia, el camping Puntica pone a su disposición diversos servicios. Desayune con pan fresco de la panadería y deguste las delicias locales en el restaurante in situ. En la tienda de comestibles encontrará todo lo que necesita y dispondrá de conexión WIFI gratuita, muy apreciable para ver una película en familia en las noches de verano. Otros servicios de pago incluyen una lavandería, alquiler de bicicletas, alquiler de neveras y masajes en un bonito espacio reservado a tal efecto.

Las casas móviles que el camping Puntica ofrece en alquiler le harán sentirse como en su propia casa. Cómodas y funcionales, cuentan con cocina totalmente equipada, salón, dormitorios, baño, aseo y una linda terraza cubierta donde podrá pasar agradables momentos al aire libre.

Alrededor del camping Puntica

Desde el camping Puntica podrá realizar numerosas excursiones, ya sea en las cercanías o un poco más lejos. La proximidad al mar permite disfrutar de las hermosas playas locales, y practicar actividades náuticas como buceo, snorkel, motos acuáticas y mucho más.

Istria, la península más grande de Croacia que se adentra en el Adriático es una tierra de mezclas y contrastes culturales debido a su situación geográfica y también por su historia. Muchos pueblos han dejado aquí su huella: histrios, griegos, romanos, ilirios, venecianos, austriacos, húngaros, italianos, yugoslavos... Al norte del municipio de Funtana, la ciudad de Poreč es una de las localidades más turísticas del condado de Istria, principalmente por su patrimonio monumental e histórico, aunque también por sus playas y sus bellos paisajes. Su monumento más importante es la Basílica Eufrásica, que data del siglo VI y fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Esta obra maestra del arte bizantino del siglo VI es famosa por sus exquisitos mosaicos dorados que cuentan historias bíblicas con asombrosa belleza y detalle. Aproveche su visita para conocer el casco antiguo, con sus tiendas, cafés y edificios históricos. Para terminar, descubra las cuevas de Baredine, una maravilla natural que ofrece una visión del mundo subterráneo de Istria. Las visitas guiadas lo llevarán a través de salas adornadas con estalactitas y estalagmitas que han creado formas interesantes y asombrosas como la estatua muy realista de la Virgen María en una fascinante experiencia educativa.

Al sur de Funtana se encuentra la hermosa ciudad costera de Rovinj que es puro romanticismo. Un centro urbano rico en arquitectura veneciana y un pequeño puerto encantador con sus muelles repletos de restaurantes y bares donde podrá degustar marisco fresco. No en vano se la conoce como la "Perla de Istria". Visite el casco antiguo deambulando por sus estrechas calles empedradas con paredes de vivos colores y el sonido del mar Adriático de fondo. La catedral de Santa Eufemia domina la urbe desde sus 57 m de altura. Construida cuando Rovinj servía de baluarte para la flota veneciana, está considerado el edificio barroco más grande de Istria.

Para los amantes de la naturaleza y adeptos al senderismo, el Parque Natural de Učka es un verdadero paraíso. El relieve montañoso y la proximidad al mar han creado un clima específico y condiciones favorables para el desarrollo de una frondosa vegetación forestal, praderas y otros hábitats antrópicos, donde la flora y fauna endémica vive protegida.